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martes, 21 de octubre de 2014

CRÍTICA PET SEMATARY 2 (1992) . POR NAHUEL AVENDAÑO

SISTEMA DE CALIFICACIÓN: ☆ MALA BUENA MUY BUENA EXCELENTE



Sinopsis:

Durante el rodaje de una de sus películas, la famosa actriz Renée Hallow, muere electrocutada bajo extrañas circunstancias. Su hijo, Jeff Matthews, estaba presente, y la muerte de su madre supone un duro golpe para él. Jeff se va a vivir con su padre, que es veterinario en un pequeño pueblo llamado Maine. Una vez allí, descubre un antiguo cementerio indio, y oye hablar de una misteriosa leyenda. Se hace amigo de Drew, el hijastro del sheriff del lugar, un tipo primitivo y testarudo que maltrata a su familia. Jeff y Drew acuden al cementerio indio para enterrar a su perro, que resucita al día siguiente con ansia de sangre, tal y como cuenta la leyenda.

Una de las tantas secuelas olvidadas o incluso desconocidas de su existencia,Pet Sematary 2 intenta seguir con el buen recibimiento de su antecesora,y aunque no parezca,deja un buen sabor al verse.

Obviamente, esta entrega dista mucho de la anterior, desde el inicio, ya que no esta basada en ningún libro, (la novela Pet Sematary no cuenta con una segunda parte), y se nutre casi por completo de la trama de esta última, a tal punto que el argumento es predecible, tanto que jamás construye un estado de suspenso inquietante, y mucho menos de miedo, igualmente carenciada en sustos repentinos típicos en las cintas de terror. No quiero caerle encima por el mencionado motivo, ya que otras sagas continuaron implementando una y otra vez el mismo argumento pero aun así se las arreglaban para generar incertidumbre y misterio, acá, cuando se plantea la historia, los personajes parecen saber todo sobre el misticismo del cementerio, su magia y cualidades con anterioridad, por lo tanto, al no haber sucesos que los dejen perplejos de sorpresas, las actuaciones flojean y no pueden adaptarse a un climax de horror y hechos sobrenaturales. Sin embargo, un todavía joven Edward Furlong sabe llevar un protagonico a pesar de no sobresalir con su desempeño.

Otro detalle a tener en cuenta es que la trama no hace mucho honor al nombre. La mascota de Drew, el amigo del protagonista, es muerta a manos del policía Gus, el padrastro de éste último. Es ahí donde hay una conexión mas directa con la primer versión. La mascota vuelve a la vida y solo es relevante al causar casi por venganza, la muerte de Gus, el cual también es sepultado en el cementerio indio y por ende, vuelto a la vida. Desde ese punto es él quien es mas decisivo en lo que resta del film, acechando a Drew y su madre. Este personaje esta muy bien encarnado por Clancy Brown, quien parece sentarle bien los papeles de tipo duro y autoritario, rememorandolo de viejos títulos como The Shawshank Redemption o Starship Troopers. Su desempeño como padrastro cruel queda perfecto para un personaje propio de cualquier historia de Stephen King,mas allá que luego, en algunas escenas, todo tome un tono mas burlesco y hasta cómico.

Vale destacar las bellas locaciones idénticas a las de la primer película, una fotografía igual de grandiosa, lo que deja entrever que fue una secuela bien trabajada y no algo a medio pelo. La sangre y maquillaje resultaron muy realistas y convincentes. The Ramones vuelven a hacerse presentes con otra de sus canciones, no compuesta exclusivamente para el film esta vez, compartiendo soundtrack con otras piezas musicales al estilo del punk rock muy noventeras.

Para ir redondeando, lamentablemente la película no alcanza un ritmo y un climax como para poner los pelos de punta, pero a pesar de todo puede volverse muy entretenida con el paso de los minutos, así que no será la gran cosa pero se deja ver.

Puntuación: