Sinopsis: En una España factible de dentro de pocos años se han abolido las autonomías y la situación de crisis económica y social es todavía más profunda. El país está en bancarrota, se multiplican los casos de corrupción en una clase política títere de los poderes económicos que vive ajena e insensible a los verdaderos problemas de los ciudadanos. Todos ellos conforman una casta de intocables preocupada únicamente de mantener sus privilegios. Mientras tanto, la clase media ha desaparecido. La mayor parte de la población sobrevive por debajo del umbral de la pobreza. Se tambalean entre la crispación y la frustración, sin saber qué pueden hacer para cambiar su miserable destino. En este contexto estalla una revolución imparable liderada por enfermos terminales.
El cine de denuncia social mayormente ha sido minoritario y poco destacado dentro de la cinematografía española, más allá de documentales y centrando más la mirada en la ficción. Sin embargo, de un tiempo a esta parte, con la crisis económica aun haciendo estragos en España casi nueve años después de que empezara, se han ido haciendo varias propuestas destacables de cine de denuncia social. Películas como "5 metros cuadrados", "Ayer no termina nunca", "B" o "La chispa de la vida" no disimulan su denuncia a la situación de crisis económica y corrupción política que vive España. Incluso propuestas más comerciales también ofrecen, a parte de entretenimiento, una pequeña representación y reflexión de dicha situación, como "El desconocido", "Torrente 4: Lethal Crisis" o "Torrente 5: Operación Eurovegas".
En esta revitalizaión del cine de denuncia social en la cinematografía española se apunta ahora "La revolución de los ángeles", remarcable ejercicio cuya modestia de medios limita el resultado final, debido a unas pretensiones honestas pero demasiado ambiciosas. Nos encontramos seguramente con la película más descarada en cuanto a denuncia de la situación de crisis económica y corrupción política en España, un descaro que resulta atractivo hasta cierto punto, pues la historia acaba estando al servicio de la tesis de la película, se da más importancia a la denuncia social en sí que a la historia. La equivalencia literaria de la película sería más un ensayo que una novela. En "5 metros cuadrados" o "Ayer no termina nunca" la denuncia social siempre destaca, pero se mantiene a un segundo término, deja que la historia priorice. La denuncia social se muestra sólo como el contexto, los personajes de la película son los que se llevan el protagonismo. En "La revolución de los ángeles" el protagonista es el contexto, mientras que los personajes son una mera excusa para mostrar el contexto, una comparsa para justificar el hacer una película de ficción en vez de un documental.
Sin embargo, no por eso "La revolución de los ángeles" deja de ser una película merecedora de verse. Es cierto que sus evidentes limitaciones presupuestarias le pasan factura, y no han sabido disimular una escasez de medios que en momentos llega a distraer, pero las honestas intenciones de los que han hecho posible la película compensa en cierta medida esos defectos. El espectador se queda con lo importante, el mensaje que transmite la película. El problema no son sólo los que nos arrebatan la libertad y la dignidad, el problema también son los que no luchan por ellas. Si la sociedad no lucha para recuperar la libertad y la dignidad del poder que les ha arrebatado eso mismo, entonces no tendrá modo de conseguir esa libertad y dignidad a la que tiene derecho. A veces la sociedad tiene que luchar por sus derechos, sobretodo cuando los gobernantes gobiernan sólo para beneficiarse ellos mismos en vez de para servir a la sociedad. Cuando eso ocurre, cuando el despotismo y la desvergüenza en la clase gobernante alcanzan niveles insoportables, y el mismo poder establecido por el pueblo se niega a servir al pueblo y a gobernar por y para el pueblo, a veces la respuesta más desesperada a esa situación suele ser la última que se contempla y la única que queda, la revolución. Por muy violenta y sangrienta que pueda ser una revolución, cabría pensar que sería justificadamente necesaria, pues serviría como respuesta a una situación tan insufrible e insoportable que sólo permite esa reacción para remediarla o contrarrestarla.
"La revolución de los ángeles" es una radical muestra de la situación de crisis económica y corrupción política que vive España, algo llevada al extremo, pero para nada ficticia ni irreal, todo lo contrario. No es descabellado pensar que, de seguir así, la situación en España podría llegar a ser tan extrema como lo plantea la película. "La revolución de los ángeles", a pesar de sus defectos, es una propuesta honesta, crítica y a la vez ambiciosa, y por eso todos los que la han hecho posible merecen mi respeto como crítico y como persona.
Lo mejor: La estupenda interpretación de Roberto Cairo en ésta su última y póstuma película.
Lo peor: Que el resultado en su conjunto parece más el episodio piloto de una serie que una película, lo que puede confundir al espectador.
Mi calificación es: